La Cooperación Alemana, a través de la GIZ, implementa un programa para fortalecer la lucha contra flujos financieros ilícitos. Como parte de este programa, el GAFILAT aprobó un manual para realizar simulacros de congelamiento de activos basados en coincidencias en listas de sanciones de las Naciones Unidas sobre financiamiento al terrorismo y proliferación de armas de destrucción masiva. El manual proporciona una guía para autoridades y sujetos obligados, recopilando información a través de encuestas y análisis documental. Su objetivo es permitir a los países verificar el funcionamiento de sus mecanismos internos contra el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo.